Se trata de una pistola cuyo calibre 22 corto es compatible con el proyectil retirado del cadáver de Esteban Ariel Ariza. Por el hecho siguen detenidos un hombre, sus dos hijos y un amigo de ambos.
El arma de fuego con la que el último domingo a la noche asesinaron a Esteban Ariel Ariza (35) fue hallada en las últimas horas adentro de un pozo ciego ubicado en las inmediaciones de la plaza en la que se produjo el crimen, en el mismo barrio 2 de Abril.
Se trata de una pistola calibre 22 corto es compatible con el proyectil retirado del cadáver de la víctima. Según
explicaron fuentes del caso a LA CAPITAL, personal policial de la subcomisaría Camet, en colaboración con la comisaría sexta y la Dirección de Riesgos Especiales, la encontró durante un allanamiento realizado en una casa de Cisneros al 300.
Conforme señalaron los informantes se trató de un intenso operativo, debido a que los uniformados permanecieron casi cinco horas buscándola entre excremento, ya que contaban con el dato certero de que los autores del homicidio la habían intentado esconder en ese lugar.
Cabe destacar que por el hecho permanecen detenidos un hombre de 45 años, identificado como Claudio Fernández; sus hijos Claudio y Matías, de 25 y 23; y Matías Guevara, un amigo de ambos jóvenes, de 18.
El hecho ocurrió el domingo por la noche cuando en las inmediaciones de una plaza ubicada en Cisneros al 500 la víctima retó a un niño de 12 años porque, de acuerdo a la reconstrucción del caso, estaba arrojándole frutos de níspero con una honda a su casa. En el afán de que el menor dejara de molestarlo, Ariza también le habría propinado gritos y hasta un golpe, que provocaron su llanto y su pedido de auxilio a sus familiares.
El arma de fuego con la que el último domingo a la noche asesinaron a Esteban Ariel Ariza
Conforme trascendió, ese niño también es hijo de Claudio Fernández padre y cuando corrió a su casa, emplazada en el mismo barrio que la de Ariza, contó lo ocurrido, situación que habría generado una reacción violenta en su padre, hermanos y allegados.
Lo que siguió después, según la policía y el fiscal Castro, fue que varias personas entre las que estaban presentes al menos Claudio Fernández padre y Claudio Fernández hijo fueron en busca de Ariza, al que encontraron en la plaza mencionada antes. Tras recriminarle que había golpeado al menor, los atacantes lo agredieron verbal y físicamente. Y hasta golpearon a su hijo, de tan sólo 13 años (uno más que el otro niño).
En ese contexto fue que se produjo un disparo que hirió a Ariza en el pecho. Si bien todavía no se sabe quién efectuó la detonación, los mismos agresores, al caer en la cuenta de lo que habían hecho, decidieron cargar a la víctima en su automóvil y llevarla hasta el Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA), con el objetivo de evitar su deceso.
Finalmente, Ariza falleció como consecuencia de las grave lesión que había sufrido y dos de los Fernández (padre e hijo) fueron detenidos en el playón del nosocomio. En tanto, a los otros dos sospechosos (un hijo más del principal sospechoso y Guevara, amigo de los jóvenes) los aprehendieron en la ruta 2.
Mientras que Claudio Fernández padre y Claudio Fernández hijo se negaron a declarar ante el fiscal Fernando Castro el pasado martes, el restante Fernández y Guevara sí aceptaron hacerlo. El primero dijo que no estaba en el lugar al momento del crimen porque se hallaba trabajando, lo que efectivamente estaría probado. De todas formas, al igual que los otros tres hombres, sigue detenido porque se investiga si fue cómplice al encubrir el homicidio.
En cambio, el segundo dio una versión diferente del caso, que no modificó su compleja situación procesal.